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Microfincas: qué son, cuáles son sus ventajas y por qué están transformando el mundo rural

23/05/2025
Finca de pequeño tamaño, ejemplo de las microfincas.

Las microfincas, aquellas fincas rústicas con una superficie inferior a 10 hectáreas, están redefiniendo el mercado inmobiliario y rural en España.

Pero ¿qué son exactamente las microfincas? ¿Qué ventajas ofrecen en comparación con las grandes fincas? ¿Por qué están transformando el mercado inmobiliario y rural? En este artículo, Cocampo responde todas estas preguntas.

¿Qué son exactamente las microfincas?

Las “microfincas” son fincas rústicas de pequeño tamaño (menos de 10 hectáreas) que, por lo habitual, cuentan con una vivienda que es utilizada como segunda residencia. No obstante, en algunos casos se están convirtiendo también en primera residencia.

Su potencial para usos agrícolas, ganaderos o recreativos es un complemento importante que valoran las familias que compran este tipo de propiedad.

“Muchos compradores valoran la posibilidad de tener un huerto o una pequeña explotación agrícola o ganadera, además de la conexión con la naturaleza.”, explica Regino Coca, CEO y fundador de Cocampo, plataforma líder en la compraventa y el arrendamiento de fincas rústicas.

Estos inmuebles reciben el nombre de “microfincas” para resalta una de sus principales características: su reducida superficie.

La relevancia creciente de las microfincas en el panorama actual

En la actualidad, las microfincas han ganado relevancia en el mercado inmobiliario y rural debido a varios factores, que se explican a continuación:

Una alternativa a la vivienda urbana

Estas propiedades se han convertido en una alternativa residencial atractiva, ante la escasez de oferta de vivienda y el consecuente encarecimiento de los precios.

De un tiempo a esta parte, cada vez más personas buscan alternativas a la vivienda urbana en las grandes ciudades, entre las que se encuentran las parcelas de pequeño tamaño.

El impulso a la economía local en las zonas rurales

La llegada de nuevos propietarios en las zonas rurales impacta de manera positiva en la economía rural. Esto se debe a que los nuevos propietarios fortalecen el sector servicios, que engloba comercios, bares, restaurantes, escuelas, hospitales, etc.

Además, estos traen nuevos recursos financieros a los municipios donde están las fincas, porque producen un aumento en el consumo local y la recaudación fiscal.

Un impulso para agentes y agencias inmobilarias

Las agencias inmobiliarias también se están viendo afectadas por el incremento del precio del suelo urbano. La crisis de la vivienda está haciendo que las agencias presenten dificultades para acceder a producto, mientras que la demanda no deja de crecer.

Para las agencias, las microfincas son una forma de diversificar su cartera y satisfacer la demanda, lo que las ha motivado a explorar su mercado.

Reflejo de la fragmentación de la tierra y su impacto

En España, el 41,3% de los titulares de fincas rústicas son mayores de 65 años, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) analizados en el Informe 2025 Cocampo sobre la Estructura del Suelo Rústico en España.

El envejecimiento del sector agrario está produciendo un aumento en las transmisiones de fincas rústicas por herencia y, en consecuencia, una fragmentación del suelo con la división de los terrenos en parcelas más reducidas. Desde 2009, las fincas de menor tamaño se han disparado. Sólo las fincas de menos de una hectárea han aumentado un 59,0% desde entonces.

“Cada vez más, las fincas se dividen en unidades más pequeñas, lo que, en muchos casos, lleva a los herederos a venderlas. Esto puede deberse a su desconexión con el campo o al hecho de que la explotación que han heredado no es suficientemente grande como para ser rentable a nivel económico.”, indica el fundador de Cocampo.

Todo esto ha incrementado la oferta de parcelas de pequeñas dimensiones en el mercado.

El estilo de vida que ofrecen

Las microfincas, como se sitúan por norma general en las zonas rurales, ofrecen un estilo de vida más tranquilo y una mayor conexión con la naturaleza, dos aspectos que han ganado relevancia a raíz de la pandemia.

Ventajas de invertir o vivir en una microfinca

Invertir o vivir en una microfinca ofrece varias ventajas. Entre ellas, están:

Sostenibilidad y autoconsumo

Estas propiedades no sólo pueden servir como vivienda principal o segunda residencia, sino que además pueden destinarse al cultivo de alimentos para autoconsumo mediante pequeños huertos o explotaciones agrícolas y ganaderas a pequeña escala.

Menor inversión inicial comparado con grandes fincas

Como consecuencia de su reducido tamaño, su precio en el mercado, por lo general, resulta inferior al de las fincas de mayor superficie. Lo anterior es una ventaja para tener en cuenta, porque adquirir una finca rústica supone una importante inversión inicial.

Potencial para el turismo rural o proyectos agroecológicos

Las casas de las que disponen estas fincas pueden utilizarse como alojamientos rurales para escapadas de fin de semana o vacaciones. El turismo rural ha experimentado un auge en los últimos años, convirtiendo a las microfincas en una oportunidad de negocio.

Un proyecto de alojamiento rural puede complementarse a su vez con numerosas actividades, como el senderismo o la agricultura ecológica.

Calidad de vida y escape del entorno urbano

Tras la pandemia ha crecido el número de personas que valoran la tranquilidad y buscan alejarse del ritmo de vida acelerado del entorno urbano La vida en una zona rural, a diferencia de la ciudad, es tranquila y sin estrés. Las fincas rústicas pequeñas hacen posible disfrutar de este estilo de vida más pausado.

¿Para quién es ideal una microfinca?

Los perfiles interesados en adquirir microfincas son variados. Destacan los siguientes:

Nuevos residentes rurales (Neorrurales)

Uno de los perfiles que más demandan microfincas es el de los neorrurales. Son conocidas como tal las personas que deciden dejar la ciudad y mudarse al campo en busca de un estilo de vida más tranquilo.

Existen dos razones que motivan a los urbanitas a dar el paso de vivir en el campo. Por un lado, la tranquilidad y desconexión que ofrecen las zonas rurales, incomparables con las de cualquier otro lugar. Por otro lado, el auge del teletrabajo y la mejora de la conexión a Internet en estas áreas.

Familias buscando segundas residencias

A causa de la escasez de oferta de vivienda y el consecuente aumento de los precios del suelo urbano, cada vez más familias, tanto nacionales como internacionales, buscan alternativas más económicas de vivienda, como las microfincas.

Las familias las demandan, por lo habitual, como segunda residencia. No obstante, hay algunas que también apuestan por ellas como vivienda habitual.

Emprendedores con proyectos a pequeña escala

Los emprendedores con proyectos a pequeña escala son otro de los perfiles que se sienten atraídos por las microfincas.

Estas fincas les proporcionan el tamaño perfecto para desarrollar sus proyectos, ya sea la siembra de cultivos, la cría de ganado o el desarrollo de iniciativas de turismo rural. Y, al mismo tiempo, les permiten reducir los costes de mantenimiento respecto a las fincas de mayor extensión.

Jubilados activos

Las microfincas también están despertando el interés de los jubilados activos. Dentro de este perfil se encuentran las personas que, tras alcanzar la edad de jubilación, deciden seguir trabajando (a tiempo parcial o completo) y perciben el 50% de su pensión.

Aunque muchos son agricultores o ganaderos que prolongan su actividad profesional, también hay jubilados que desean emprender nuevos proyectos o negocios, y optan por hacerlo en el medio rural.

El papel de Cocampo en el mundo de las microfincas

Cocampo ha sido el pionero en introducir el término “microfincas” en el mercado inmobiliario y rural del país.

Desde que detectó el aumento en el interés por este tipo de fincas en España, la plataforma ha puesto el foco en facilitar su compra y venta. Así pues, ofrece numerosas oportunidades de inversión a través de su portal de anuncios.

Cómo encontrar microfincas a través de Cocampo

Encontrar microfincas a través de Cocampo es muy sencillo. Para ello, sólo hay que acceder al listado de fincas rústicas en venta en España.

Una vez en el listado, verá que Cocampo ofrece un sistema de filtros en la parte izquierda de la página. Este permite filtrar por tipo de uso (agrícola, ganadero, forestal, cinegético, de recreo u otro), tipo de anuncio (si es una finca de banco o nueva), precio y superficie.

Para obtener las microfincas, basta con indicar en el filtro de superficie un máximo de 10 hectáreas y hacer clic después en el botón «Aplicar filtros». A continuación, se mostrarán únicamente las microfincas disponibles en la plataforma.

En caso de estar interesado en una zona geográfica específica, también se puede aplicar el filtro por provincia, situado en la parte superior de la página.

Consideraciones antes de adquirir una microfinca

Adquirir una microfinca puede conllevar riesgos, como ocurre con cualquier inversión. Por consiguiente, es conveniente seguir las siguientes recomendaciones antes de iniciar el proceso, para hacerlo lo más seguro posible:

Aspectos legales y normativas urbanísticas

Previo a invertir en una microfinca, se debe consultar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio donde está la propiedad. Este documento regula los usos del suelo y las edificabilidades en el municipio y, por tanto, permite saber si el uso previsto para la finca está permitido dentro de la normativa urbanística.

Desde el punto de vista legal, es importante además asegurarse de que el vendedor es realmente el titular registral de la finca, y de que esta se encuentra libre de cargas y gravámenes, como hipotecas, embargos o servidumbres. Para ello, no hace falta más que solicitar una Nota Simple al Registro de la Propiedad.

Acceso a servicios y suministros

Resulta fundamental comprobar si la finca cuenta con acceso a un camino público y, en caso de no tenerlo, si dispone de una servidumbre de paso.

Asimismo, conviene cerciorarse de que la finca tiene servicios básicos (electricidad, agua…) y que estos se encuentran en buen estado. Lo anterior es importante, sobre todo, en aquellos casos en los que se tiene pensado utilizar la finca como vivienda o para la explotación agrícola o ganadera.

Potencial agrícola o de explotación

Cuando el uso que se le desea dar a la finca es agrícola o ganadero, antes de dar el paso de invertir, se debe evaluar si la tierra es adecuada para el tipo de actividad que se quiere llevar a cabo en ella.

De esta forma, es posible determinar la viabilidad del proyecto que se tiene en mente y reducir la posibilidad de que la inversión acabe siendo menos rentable de lo esperado.

El futuro de las microfincas: una tendencia en auge

Desde Cocampo prevén que las microfincas seguirán ganando aún más relevancia en el futuro debido a dos motivos: el relevo generacional en el campo y la continuación de la crisis de la vivienda.

SOS Rural, plataforma en defensa de los intereses del mundo rural, estima que el 70% de los agricultores y ganaderos que están en activo actualmente estarán jubilados o en edad de hacerlo en la próxima década. En consecuencia, las transmisiones de fincas rústicas por herencia continuarán alcanzando máximos históricos.

También, los expertos esperan que la crisis de la vivienda se agrave en 2025 y ven posible que continúe presente en los próximos años.

Fuentes

  • Informe 2025 Cocampo sobre la Estructura del Suelo Rústico en España
  • Instituto Nacional de Estadística (INE)
  • SOS Rural

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